Para cocinar una buena carne de solomillo no solo hay que arrojar la pieza a la sartén o plancha caliente, sino hacerlo con la técnica adecuada en función del resultado que busquemos. Lo primero de todo, es comprar una carne de solomillo de calidad, esta la prepararemos para que mediante el sellado del solomillo resulte más suculenta, sabrosa y jugosa al paladar. Así que quédate para conocer cómo lograrlo.
¿Qué es el sellado de carne?
El sellado de carne, o también conocido como marcado de la carne, es una técnica que se emplea en la cocina para conservar la jugosidad y sabor de la misma. Se trata de dorar la superficie de la carne en una sartén caliente o plancha antes de continuar con la cocción.
Lo que se consigue es una reacción llamada de Maillard, que crea compuestos aromáticos, y conserva los jugos internos de la carne, una vez sellado el solomillo, además mantiene su ternura y jugosidad.
La reacción de Maillard implica la combinación de aminoácidos y azúcares presentes en la carne cuando se expone al calor. Este proceso no solo desarrolla nuevos compuestos aromáticos y sabores, sino que también crea una agradable capa dorada en la superficie de la carne. Esta costra no solo agrega profundidad al perfil de sabor, sino que también proporciona una textura apetitosa y visualmente atractiva del solomillo.
Además, esta técnica desempeña un papel crucial en la retención de los jugos internos de la carne. Al formar una barrera en la superficie, el sellado ayuda a preservar la humedad natural de la carne durante la cocción posterior. Esto es esencial para mantener la jugosidad y la ternura del solomillo, garantizando una experiencia culinaria más placentera.
¿Por qué conviene el sellado del solomillo?
El sellado del solomillo es beneficioso por varias razones. En primer lugar, al dorar la superficie de la carne, se desarrollan sabores y aromas a través de la reacción de Maillard, mejorando el sabor general.
Además, el sellado ayuda a conservar los jugos internos de la carne, contribuyendo a mantener su jugosidad y ternura durante la cocción posterior. Este proceso también crea una capa exterior dorada que agrega textura y dulzor, lo que le añade matices más interesantes y un contraste para el paladar.
Para conseguir un buen sellado del solomillo se necesita calentar la superficie de las piezas con fuego fuerte, ya sea en plancha o sartén. Tras esto, el solomillo sellado en el exterior, continúa crudo en el interior, para terminar la pieza se debe continuar la cocción a fuego lento en barbacoa, sartén, horno…
Lo más importante al sellar la carne de solomillo es estar atento durante todo el proceso de las altas temperaturas, sin descuidarse, ya que puede hacer que la carne se cocine demasiado y quede seca.
En definitiva, la combinación de sabores intensificados, textura mejorada y retención de jugos hace que el sellado del solomillo sea una práctica valiosa en la preparación este y otros cortes de carne de alta calidad.